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En el camino del crecimiento empresarial, llega un punto en el que los números dejan de ser una simple obligación contable y se convierten en el eje de la toma de decisiones. Las pymes que aspiran a consolidarse, atraer inversión, optimizar su rentabilidad o escalar su modelo de negocio se enfrentan entonces a una pregunta clave: ¿Necesitamos reforzar el área financiera? ¿Y cómo hacerlo: con un perfil interno o un CFO externo?

En esta entrada analizamos las diferencias, ventajas y límites de cada enfoque, y explicamos por qué cada vez más empresas apuestan por modelos híbridos o externalizados.


1. El papel de la función financiera en el crecimiento

Un departamento financiero sólido no solo lleva la contabilidad al día. Un buen responsable financiero:

  • Aporta visibilidad sobre la rentabilidad real del negocio.

  • Establece sistemas de control de costes, tesorería y previsión.

  • Traduce la estrategia en números: presupuestos, objetivos financieros, inversiones.

  • Actúa como enlace técnico en procesos clave: búsqueda de financiación, ampliaciones de capital, ayudas públicas, operaciones corporativas.

En resumen: es un pilar para tomar decisiones informadas, detectar oportunidades y evitar riesgos innecesarios.


2. ¿Qué implica tener un CFO interno?

Contar con un perfil de dirección financiera propio puede ser positivo si la empresa tiene:

  • Un volumen de operaciones elevado y constante.

  • Procesos complejos (división por líneas de negocio, presencia internacional, etc.).

  • Necesidad de disponibilidad diaria y total dedicación.

No obstante, incorporar un CFO interno implica un coste estructural elevado (sueldo, seguridad social, beneficios, formación, etc.) y requiere un esfuerzo importante de selección y alineamiento estratégico.

Además, en muchas pymes el problema no es solo tener a alguien: es saber qué se necesita exactamente, con qué nivel y con qué frecuencia.


3. El modelo de CFO externo: flexibilidad y experiencia a medida

La figura del CFO externo (también conocida como dirección financiera externalizada) ofrece una solución intermedia:

  • El conocimiento y la experiencia de un profesional sénior.

  • A un coste variable, ajustado a las necesidades reales de la empresa.

  • Sin asumir compromisos laborales estructurales.

  • Con visión transversal, adquirida en múltiples sectores y entornos empresariales.

Este modelo es especialmente útil para empresas en fases de transformación, crecimiento, profesionalización o búsqueda de financiación.


4. Comparativa: CFO interno vs. CFO externo

Aspecto CFO interno CFO externo
Dedicación Tiempo completo Flexible (por horas o proyectos)
Coste Alto (estructura fija) Ajustado al uso real
Implantación Lenta (selección, onboarding) Rápida y modular
Experiencia sectorial Limitada a su trayectoria Amplia y transversal
Adaptabilidad Menor (estructura cerrada) Alta (según evolución de la empresa)
Valor estratégico Alto si se alinea bien con la dirección Alto y complementario

5. ¿Qué solución es más adecuada para tu pyme?

No hay una única respuesta correcta. Pero sí hay señales que indican cuándo una dirección financiera externa puede ser la mejor opción:

  • Estás creciendo y necesitas profesionalizar tu gestión.

  • Te estás preparando para buscar inversión, ayudas o financiación bancaria.

  • Tu contabilidad está resuelta, pero no tienes indicadores claros de rentabilidad o liquidez.

  • Quieres tomar decisiones con datos financieros fiables y actualizados.

  • Tienes picos de carga o necesitas ayuda puntual para proyectos concretos.


6. ThinkCo: dirección financiera externa para crecer con sentido

En ThinkCo trabajamos como CFOs externos de múltiples pymes. Aportamos:

  • Diagnóstico inicial y hoja de ruta financiera.

  • Implantación de cuadros de mando, previsiones y control presupuestario.

  • Soporte en financiación, subvenciones e interlocución con entidades.

  • Visión estratégica, sin perder de vista la operativa diaria.

Adaptamos nuestro trabajo al nivel de madurez, complejidad y ambición de cada cliente. Y lo hacemos con una idea clara: la función financiera no es un coste, es una inversión en decisiones mejores.


✅ Conclusión

Profesionalizar la gestión financiera es uno de los pasos más rentables que puede dar una pyme. La elección entre CFO interno o externo dependerá de múltiples factores, pero hoy existen opciones flexibles y eficientes que antes estaban solo al alcance de grandes compañías.

Si tu empresa está en un punto de inflexión, quizá sea el momento de preguntarse:

¿Estoy tomando decisiones con visión financiera o simplemente cerrando el mes?